Se realizaron movimientos de suelo en el terreno que en la zona de Villa Svea muy próximo al Barrio Copisa, se prepara para la construcción del Centro de recuperación de adictos que con un plazo de 18 meses para las obras, encara el gobierno provincial.
El Ministro de prevención de adicciones de la provincia, Samuel López, expresó al Aire de Integración que «estamos trabajando con los equipos de profesionales, para conformar el espacio, hay un pedido de la Pastoral de Cáritas que sea una comunidad terapéutica,” señaló. “Hoy por hoy tenemos varios puntos preventivos o de primer contacto con las personas o con los familiares. También espacios de atención ambulatoria, como es el Oasis de la Misericordia y en Manantiales, un centro histórico en Misiones, totalmente gratuito, con 33 años de trabajo y donde también contamos con un espacio de internación para un periodo breve; que ronda cercano al mes de internación pero realmente hay situaciones, puntuales y particulares que siempre se analizan», mencionó.
Dijo que «se estima que serán unas 20 habitaciones las que se construirán con atención a diferentes franjas etáreas».
Sobre el consumo de sustancias adictivas remarcó que “lo más preocupante, que por ahí pasa como desapercibido y es socialmente aceptado, es el consumo de alcohol en primer lugar y después el tabaco, que no genera daños a terceros pero si, a la larga, termina siendo un problema para la salud pública y extensivo a la familia, al igual que el alcohol,” mencionó.
También puntualizó respecto a la reincidencia y aumento de consumo de alcohol en pandemia “por un lado está la alcoholización, que de por si es un consumo problemático y puede generar accidentes, violencia, etc. Y después está el alcoholismo en si, como enfermedad y después recién vienen las sustancias ilegales, pero generalmente nos centramos solamente en ellas” expuso.
En sentido “lo que a nosotros nos está preocupando seriamente son los trastornos alimentarios, por ejemplo: la anorexia, la bulimia que apareció mucho en pandemia y hoy por si bien no se habla seriamente es el tema del uso de los dispositivos móviles, algo que también recrudeció en pandemia porque teníamos que depender de la virtualidad y principalmente los adolescentes” aseveró. Así también llamo a la familia como entorno de prevención para estos usos prolongados y exposición excesiva a las pantallas de los dispositivos móviles.
Dijo que «estadísticamente entre los 12 y los 14 años, se da el inicio de consumo, es una edad preocupante, el inicio de la secundaria” aunque también explicó que muchas veces es la familia la facilitadora de ciertas prácticas; pero en definitiva estamos generando daños igualmente: tomar en la casa está bien, y no, no es asi», indicó. Aquí también remarcó que se observó un crecimiento de consumo de alcohol mayormente, en adultos mayores en este tiempo de pandemia, de un 6 a un 12%.
En cuanto al consumo de tabaco mencionó que también bajó de los 14 años de edad, a los 12 años de edad, en inicio”.