Los carteles de casas en venta se replican, los locales y departamentos en alquiler también. Hacía tiempo no se veían tantas ofertas y probablemente, se vinculen a la crisis económica que a muchos le obliga a vender y a otros a alquilar a menor precio.
“Las ventas están frenadas, nos piden aumentar precios de las casas en venta o departamentos en alquiler, pero la gente no está pudiendo pagarlos. Había demanda de alquileres hace 5 meses y hoy solamente en mi inmobiliaria tenemos ofertas porque no se alquila, solamente nosotros tenemos 70 departamentos vacíos, entre edificios nuevos y ya antiguos en distintos lugares y zonas, con muchos o menos servicios y con precios varios. Los servicios se dispararon y los estudiantes no pueden alquilar lo mismo y buscan achicarse, está difícil”, dijo Ana Maria Bojko, integrante de la Cámara inmobiliaria de la provincia.
Dijo que “todos los valores son en dólares, así nos piden los propietarios, en la escribanía transformamos en pesos, pero valor dólar. La gente mira el dólar y quiere que subamos los alquileres y no es posible”, añadió en diálogo con El Aire de Integración.
“No hay tolerancia, no hay paciencia, se atrasan los pagos de alquileres y eso es una realidad. La gente no llega con sus sueldos y menos si tienen niños, es un combo triste.
Los locales comerciales del centro se fueron afuera, hacemos de mediadores todo el tiempo entre inquilinos y propietarios, para lograr acuerdos”, indicó.
Asimismo, sostuvo que “tenemos muchas ofertas de casas en venta sin duda, hay muchos que no quieren poner cartel para que no le intrusen o entren. A partir de julio del 2017 comenzaron a poner casas en venta pero no se venden, o porque suben el precio- muchas están sobreevaluadas- o porque no hay circulante. Muchos piden lo que les parece, entre 5 y 6 millones por una casa de unos 20 años. Oberá está muy caro para vender, si bien nosotros hacemos las tasaciones, muchos dueños no aceptan lo que se les tasa y quieren vender lo que ellos piden y siempre hay un colega que les dá el gusto, no se regula”, se quejó.
Finalmente remarcó que “la gente tiene mucha incertidumbre, no sabe qué hacer ni qué pasará. Hoy la remamos nomás, no podemos arrancar el motor, es lo que tenemos”, sostuvo.