En Oberá hay 3 Hogares de Ancianos, del orden privado, inscriptos en comercio municipal, más uno que corresponde al ámbito municipal, según el Secretario de Desarrollo Humano, Rafael Marquez Da Silva. Ninguno fue supervisado aún este año. La tarea corresponde a la Dirección de Gerontología del Ministerio de Salud Pública.
En la provincia, de acuerdo a lo expuesto por Alejandro Miravet, Vicepresidente del Consejo Provincial de Adultos Mayores, existen 45 Hogares registrados como tales pero solo 5 tienen los requisitos necesarios y obligatorios para ser tomados como tal.
En el medio, los abuelos, adultos mayores, tienen como último refugio-muchas veces- estos sitios. Sea porque están enfermos o porque nadie en el seno familiar los puede cuidar, o simplemente, porque no tienen a nadie.
“Por ley, está estipulado diferentes categorías para cada uno, depende de la complejidad que ofrece atender el Hogar. Nosotros en la municipalidad, tenemos la categoría A, que son las de personas autosuficientes, o sean que pueden valerse por sí mimos, es el más básico”, dijo Márquez Da Silva.
“No solo le ofrecemos atención diaria, comida sino el hacer huertas, actividad física, para que estén ocupados y tengan una calidad de vida mejor”, señaló.
“El Ministerio de Salud, Bienestar social y el municipio fiscalizan a través de evaluaciones periódicas, nosotros solicitamos la revisión pero desde el año pasado hasta acá, no vinieron”, precisó.
En la provincia, se supone que hay unos 100 mil adultos mayores. “Salud Pública es la que debe vigilar que las condiciones estén dadas para habilitar estos hogares de larga estadía, pero no siempre es así, muchas veces, se empieza con la actividad con 2 abuelos, luego más en una casa común y finalmente se requiere la aprobación o habilitación. El problema es, que cuando se detecta que no reúne los requisitos, ya no se sabe dónde colocar a los abuelos que están allí. De esta forma, se han detectado 45 Hogares en la provincia, pero solo 5 están habilitados”, remarcó en diálogo con El aire de Integración, Alejandro Miravet.
Por otro lado tenemos a Pami que brinda atención a sus afiliados pero también tiene muy poco habilitados. Además tenemos muchos en condiciones de clandestinidad, ni siquiera registrados en el municipio, en condiciones paupérrimas, con espacios pequeños, hasta personas con discapacidad, pero como la familia directa no tiene para pagar un Hogar registrado, habilita llevar a los abuelos a estos lugares. Nos enteramos de ellos, cuando pasa algún problema”, agregó Miravet.
“Este Consejo está conformado por el Ministerio de Bienestar social y todas las ONG e instituciones que tienen que ver con el adulto mayor. La idea es ayudar, orientar a los propietarios de estos Hogares, geriátricos o residencia de larga estadía para que estén en condiciones. Igualmente, la Dirección de gerontología del Ministerio de salud pública, a cargo de Mirta Clara Soria, es quien debe realizar la supervisión, aunque muchas veces se encuentra con la falta de presupuesto para esta tarea y nosotros tratamos de ayudar”, aportó el funcionario.
Los abuelos, en tanto, dependen de la voluntad de quienes lo atienden , de la contención de quien esté de turno, si es que sus familias no los visita asiduamente.