De 12 testigos sólo declararon 3 finalmente, en una nueva jornada de juicio oral por el Caso Knack. A ello se suma el pedido de captura por parte del Tribunal Penal de otro testigo, que no se presentó como tal. Así comenzó una nueva jornada de juicio oral del Caso Knack, que se lleva adelante hace 3 semanas y que va arribando a instancias de alegatos.
El aspecto central estuvo presente en el testimonio de Jose Humberto Pérez (ex cuñado de Juan Ramon Godoy, uno de los imputados) quien aseguró varias veces le «invitaron» a participar en atracos. Incluso dió detalles de la forma de «operar» de Marcial Alegre y Juan Ramón Godoy, hechos que escuchaba en cada conversación que presenciaba en el taller de Alegre donde iba Godoy con frecuencia y a quien él acompañaba.
«En la época que pasó ese suceso terrible yo estuve 15 dias antes en casa de Godoy, él hablaba de hacerle a mi hermana un cumpleaños muy grande que nadie iba a olvidar, siempre alardeaba y a mucha gente le hacía el cuento del tío», aseguró.
Dijo que «Una vez me invitó a hacer una entradera a mi patrón, que era un contratista forestal de Virasoro (Ctes), quería que le pase los datos de todo los movimientos, queria entrarle un dia de pago, yo traté de desviar la «conversa» para otro lado», expresó Pérez.
«Solían encontrarse en el taller de alegre con Godoy, el tenia un lavadero de autos, estaba armando otro cuando pasó lo de Knack», explicó.
En otro tramo de su declaración dijo que «en otra «conversa» con Marcial, me propuso hacer trabajos por Virasoro, Santo Tomé, para repartir droga, y que le diga si salia por algún lugar donde veia movimiento de plata, que le avise que ellos se encargaban de lo otro. Yo inmediatamente relacioné lo sucedido en Panambí, cuando me acordé lo que me dijo un dia, que cuando se hace algo asi una entradera o eso, no tienen que quedar testigos de nada, si fuese posible quemar todo, me dijo».
«Tambien me dijo Alegre que si agarraba el laburo tenia que tener por seguro que la mafia no jode, no acepta ningun error, sino era boleta», sostuvo.
«Después que declaré la primera vez recibí varias amenazas de teléfonos con característica de Rosario, de Córdoba, de Chaco, pero lamentablemente perdi ese teléfono», señaló.
Contó luego que un compañero de la forestal donde trabajaba tenia un revólver calibre 38, que no andaba el percutor y que le preguntó quien podia arreglar, que le llevó a Alegre quien luego de varios meses le dijo que desapareció el arma, argumentando que había desaparecido, y que él (Pérez), tuvo que pagar a su compañero 3 mil pesos por esa razón.
Tambien declararon la suegra de Godoy que vio pasar el auto a Mojón Grande (el Bora), que lo reconoció porque manejaba el auto, iba a alta velocidad y coincidió con el horario del hecho. También declaró el suegro, que aportó algunos otros datos.
La Fiscal del caso Myriam Silke y el Fiscal Coayudante Elias Bys, se mostraron seguros que la declaración de los testigos apunta a estos 3 imputados y que pedirán la condena máxima, o sea cadena perpetua.
«Estamos viendo que se está comprobando todo lo que se dijo en el requerimiento de elevación a juicio, las pruebas están acreditando que fue así como sucedieron los hechos. El vehículo, el lugar donde lo vieron, coinciden. Los testigos fueron muy claves y valientes», dijeron.
«Se está reafirmando la imputación que hemos hecho oportunamente.Faltan que hablen los peritos acerca de las pruebas de ADN», expresaron sin descartar que puedan haber participado otras personas en el cuádruple homicidio y que éstas sean sujetas a investigación posterior.
Este Jueves continúa la presencia de testigos y la próxima semana además de la presencia de peritos se iniciarían ya los alegatos de las partes.