Hace algunos días los vecinos del Barrio Nuevo asentamiento – próximo a Villa Blanquita – reclamaban por luz y agua además de calles en buen estado. Son más de 120 familias que se ubicaron en tierras municipales o fiscales hace unos años y que están sin los servicios básicos.El municipio decidió otorgarles un permiso provisorio para que la Celo, pueda bajarles la energía eléctrica. No es el único, situaciones similares se observan en muchos lugares de Oberá que crecieron rápida y desorganizadamente ante la demanda de viviendas de cientos de familias.
Según la ONG Techo, el último relevamiento- hecho en la ciudad- daba cuenta de 27 asentamientos, donde habían unas 2 mil familias y ahora serian unos 31 asentamientos por lo que se podría hablar de otras 400 familias. «Son cientos de familias, muchos tienen que tener clases virtuales y no tienen luz ni agua, con situaciones urgentes a resolver. Esta pandemia dejo en evidencia muchas cosas, sirve para comprender que hay cosas que se debe planificar y regularizar. Incluso en los asentamientos que habiamos regularizado ya hay nuevas familias asentadas, a eso hay que sumar los nuevos barrios o asentamientos, nunca decrece, al contrario; crece»; explicó Ingrid Cardozo, titular de Techo Obera.
«Sabemos que hay nuevos barrios porque nos enteramos por los compañeros del comité de crisis, porque estamos trabajando en otros barrios. Creció mucho la emergencia alimentaria con problemas con viviendas afectadas por las últimas tormentas además», dijo.
«Teniamos en mente un mejoramiento de alumbrado en el barrio donde trabajábamos, pensamos retomarlo ahora, tenemos comprado elementos y luminarias para colocar. Pero todo este tiempo estuvimos acompañando a comedores y merenderos-5 en total-con mucho esfuerzo y elementos»sostuvo.
«Hace 3 semanas comenzamos un trabajo con todo el protocolo que eso implica, volvemos a encuestar, aunque muchos no están de nuestros integrantes, porque son estudiantes y estan en sus casas, no acá.»explicó.
Aclaró igualmente que» como organización no nos dedicamos a la emergencia alimentaria, pero este año nos dimos cuenta que es lo esencial, antes que nada, por lo que decidimos hacer una campaña y ayudar con eso», mencionó.
La situación de falta de viviendas y el crecimiento sin medida de los asentamientos, es de todas formas lo más acuciante. Atento a ello desde el municipio afirmaron trabajan en otorgar permisos provisorios que permitan a los vecinos conectarse a la red electrica. «sabemos de este nuevo asentamiento como de las 8 flias en B Oasis; estamos trabajando para poder ayudarles. Nunca hablamos de desalojo», dijo Matías Frick, Director de Asuntos Jurídicos de la Municipalidad local.