Luego del convenio firmado entre el consorcio termal y la Facultad de Ingeniería, para un estudio técnico del pozo perforado y la cañería por donde se extrae el agua termal, se conocieron los resultados en cuanto a daños y la posibilidad de avanzar en un recambio del sistema de las Termas de la Selva, de Oberá.
El Presidente de la Celo, Rafael Pereyra Pigerl destacó el trabajo y dijo que analizan con la Municipalidad de Oberá- de la que son socios en el emprendimiento- qué acciones llevar a cabo. «Pedir ayuda extra para que quede conformado como atractivo turistico permanente es lo que analizamos», dijo. Asimismo, Ariel Chaves, Intendente a cargo, remarcó que es necesario buscar soluciones a corto, mediano o largo plazo. La Facultad de Ingeniería por su parte, se refirió a través de su Decano, Sergio Katogui y técnicos, sobre los daños encontrados. 
Según el Ing. Gabriel Tarnoski, integrante del equipo técnico de la Facultad de Ingeniería, que realizó la evaluación «son 350 mts de tuberias, unos 58 tubos evaluados, que sufren la corrosión de 12 años de utilización a temperaturas muy elevadas, con tubos de acero carbono, que se encuentran deterioradas. No todos están en el mismo estado, pero habrá que evaluar cuales pueden reutilizarse», puntualizó.
Indicó que » como técnico digo que muchos caños hay que cambiarlos, la gran mayoria podrá re utilizarse. Si el consorcio pone en marcha el emprendimiento cambiando éstos caños, está fuera de este estudio y depende de la decisión que adopte el Consorcio».
También habló respecto a otras investigaciones, como el hacer un análisis del encamisado del pozo perforado y la posibilidad de lograr un mantenimiento. «Podemos hacerlo nosotros pero demora más tiempo, hay que sumergir a 60 grados la cámara a 350 mts, no es inmediato el resultado», remarcó.
Sobre qué tubos deberían colocarse, Tarnowski dijo que «hay muchas alternativas en cuanto a tuberias que no sean de acero carbono común, que dan mayor vida, pero que sale 2 a 6 veces más caro también» .
De todas formas evaluó que si se siguiera trabajando asi como está, «se puede perder el pozo, porque se perdería el encamisado, el pozo se desmoronaría y sería como hacer uno nuevo», apuntó.
Explicó asimismo que «los emprendimientos termales donde hay mucho mineral aceleran la corrosion, si le agregamos la temperatura que es de 65° en el fondo del pozo, esto acelera la corrosión, es una característica de las aguas termales», precisó.
Las alternativas que se evalúan son cambiar parte de las cañerías para que se pongan en marcha nuevamente, o, hacer un estudio mayor para evaluar la continuidad a largo plazo, con reintegro de todas las cañerias. Conocer los distintos métodos de extracción del agua termal y -por ende- con esas nuevas herramientas, poder establecer la sustentabilidad del emprendimiento turístico para finalmente, analizar si el consorcio sigue llevando adelante este atractivo turistico o pasa la responsabilidad a otras manos.