En la noche elección de la nueva Soberana del Inmigrante y sus princesas, también se elige-a partir de otro jurado compuesto por diseñadores y especialistas del arte-al mejor Traje Típico. La distinción no tiene que ver con el mejor visto sino con el contenido cultural que éste implica, el que en esta edición n° 41 de la Fiesta Nacional del Inmigrante fue para la Colectividad Italiana.
La Reina de la Colectividad, Valeria Vargas Minuzzo, lució un vestido de bodas inspirado en los tradicionales atuendos de Piana Degli Albanesi, una comuna de la región de Sicilia. El traje tradicional, presenta sin dudas la identidad de la cultura Arbëresh. Representa el resplandeciente resultado de la fusión estilística y la armonización histórica de diferentes culturas.
Esta vestimenta se usa tradicionalmente en las fechas más importantes de la comunidad siciliana de Piana Degli Albanesi, como el día de San Jorge, la Virgen María Odighitria, San Demetrio y la Pascua, además de bautismos y bodas. Es un traje costoso, realizado a mano y pasado de madres a hijas. Actualmente se utiliza para fechas muy puntuales y hay un ejemplar en el Museo Civico Nicola Barbato, en Palermo.
Consiste en una falda de crepe georgette, de color natural, que va a la cintura y está bordada difusamente con hilos dorados en motivos florales en colores que emulan la flora del lugar. Está cargada de una simbología fundamental para la cultura de Piana Degli Albanesi, las flores van desde una primera guarda de base al dobladillo, en tres capas de altura cercana a la cintura
Sigue una fajilla con cuatro tiras bordadas atadas a la pollera, una casaca sin mangas bordadas en su delantera. Acompañado de guardas de encaje en forma de “V” , y espalda con los mismos diseños de flores e hilos de oro prendidos en la parte trasera.
Por otro lado, las mangas abiertas son del mismo tono que acompaña el traje, también bordados en la misma forma. Separada del chaleco y sujetas con espacios de por medio con botones de oro a lo largo del brazo y hombro, acompañan doce moños de galones bordados. La camisa es de lino blanco con escote en “V” , también con puntillas en el cuello y de puño amplio. Este cuello se agranda en forma rectangular cae sobre la espalda .
Uno de los principales complementos del traje es un cinturón. Denominado “brezi”, está formado por placas unidas en el centro de alto relieve y un medallón con una imagen religiosa. De oro y plata, sujeto a un cinturón metálico en tonos dorados, labrado y en unión con pequeñas placas.
Finaliza el brezi con un moño central en el pecho de 5 pétalos y un moño en la espalda, conformado con cuatro pétalos con un lazo ancho bordado en otro tono. Este cinturón es pasado de madres a hijas augurando fertilidad al nuevo matrimonio.
Coronando la cabeza, cae un velo de encaje en color natural. De su base nacen unas cintas con un moño chato bordado y una corona de tela bordad al tono.
En los extremos inferiores del velo se atan a cada lado de la cintura , cayendo entonces en puntas embolsadas.
Las joyas que se usaron para el traje en cuestión, son una imitación de la fina orfebrería siciliana de oro y plata, con incrustaciones de piedras preciosas, cumpliendo con su simbología religiosa en cada una de ellas.
Este traje fue confeccionado en Oberá, Misiones por la señora Itatí Minuzzo, en colaboración para los detalles, armado del cinturón y joyería por la señora María Laura Qüesta, ambas pertenecientes a la Colectividad Italiana
(Foto principal de la nota: PH Luana Ostapovicz)