En estos momentos en los que la principal recomendación ante la pandemia del coronavirus es mantener la higiene y el lavado de manos, parte de la población de los barrios obereños no siempre tiene acceso al líquido vital. Uno de los reclamos que se repiten en la periferia obereña es mayor provisión de agua.
Martín Mendoza encargado de la distribución de agua de la Municipalidad, explicó que la solución no es tan sencilla, ya que creció mucho la demanda, “en algunos barrios, los que tenían un tanque ahora tienen dos, hasta cuatro en algunos casos, o hicieron una casa para sus hijos en el mismo terreno y pusieron más tanques”.
Mendoza dijo que la prioridad la tienen los comedores, pero se recorre la ciudad cumpliendo dentro de lo posible un cronograma establecido, “la demanda creció y ahora demoramos más. Zonas que antes cubríamos en un día ahora nos lleva un día y medio, por lo que se demora más la entrega en algunos barrios. Como en el caso de San Miguel y San José que son las zonas más grandes, se hace en un día y medio, a veces casi en dos días. Con cuatro camiones y hasta cinco camiones diariamente”, dijo, explicando que con la demanda actual el Municipio se hace cargo de distribuir, casi 4 millones de litros mensuales de manera gratuita a los barrios.
Si bien los inconvenientes de cada sector son particulares, lo que conlleva distintos tipos de soluciones, algunos con perforaciones y tanques elevados, otros con la extensión de la red urbana que depende de la CELO, todavía algunos barrios dependen exclusivamente de la tarea que realizan los 6 choferes e igual número de ayudantes, que inician sus tareas a las 5 de la mañana con la carga de las cisternas de los camiones, saliendo con el primer viaje cerca de las 5,30hs. Tarea que suelen concluir cada día cerca de las 19hs, “nosotros contamos con dos camiones que cargan cuatro mil quinientos litros, a veces alcanza para dos casas y en otros viajes no alcanza, imaginen tener que volver a recargar en casos de los barrios más distantes como el KM 0, nos lleva tiempo”, señaló Mendoza.
Otro de los inconvenientes que detalló el funcionario municipal es que en los sectores más humildes no tienen tanques, “son personas humildes que por ahí tienen tachitos de 20 litros o tambores y la higiene se hace desear mucho en esos lugares y si no les descargamos el agua, los vecinos se quejan en los medios de comunicación. Aprovechando este espacio les pedimos a los que tienen esos tachitos de 20 litros, que los laven. Que los mantengan limpios, porque el bien es para ellos. Le pedimos que aporten en la parte de higiene para recibir el agua”, señaló.
En tiempo de emergencia sanitaria y cuarentena, uno de los servicios que la Municipalidad continúa ofreciendo es el de la distribución de agua en los barrios, “seguimos trabajando cuatro días a la semana, le damos un día de respiro a los muchachos debido a la pandemia, no es mucho descanso, pero en cuatro días tratamos de llevar el agua a todos”, manifestó Martín Mendoza.