Dos mujeres fueron incorporadas al servicio de recolección de residuos de la Municipalidad de Oberá, una como corredora y la otra, como chofer de un camión recolector de residuos. Es la primera vez que se da un hecho de estas características dentro de este sector.
Marcela de Oliveira es quién conduce el camión recolector, tiene dos hijos pequeños de 3 y 8 años y calificó a esta probabilidad laboral como un desafío. «No tengo que ir a trabajar, voy a trabajar, con agrado, con gusto»,señaló.
Dijo que comenzó hace 2 meses; «convocaron para trabajar a este sector y me presenté, pedían para ese puesto una mujer y creía que era un desafío por lo que con todos los requisitos fuí a presentarme», recordó.
«Trabajo con otra compañera Liliana, que es corredora y además otro corredor varón. Tengo dos barrios, como recorrido fijos que me han tocado. Arrancamos el trabajo a partir de las 14:00 hasta las 18,30, igual se ingresa un rato antes para revisar que todo esté en condiciones y ahí comenzamos. Los vecinos se sorprenden cuando me ven pero en general tengo mucho apoyo. no solamente de mis compañeros sino de la gente aunque muchos hombres cuando te ven manejando se corren», relató sonriendo.
Su padre , tambien empleado municipal, trabajaba en el sector luego pasó al taller «así que desde muy chiquita me crié viendo esto, yo he manejado pero nada así tan grande, pero sobra coraje así que aquí estoy», indicó.
Puntualizó que «me siento cómoda en ese lugar, me gusta ir a trabajar, yo estaba estudiando para despachante de aduanas, pero se dio esto y decidí presentarme».
Como anécdota recordó que el primer dia cuando comencé ya me quedé en el barro y tuve que pedir que una máquina viniera a sacarme pero la solución fue rápida por parte de la jefatura y eso está bueno, me acompañan y entienden», dijo.
De Olivera es madre de 2 niños de 3 y 9 años, quienes están muy orgullosos de su madre e incluso lo hablan en la escuela.