En la definición por los penales, Olimpia San Antonio, se impuso a Rosamonte de Apostóles y se alzó con el bicampeonato del provincial organizados por la Federación Misionera de Fútbol para festejar con su gente que colmó el estadio del Tiro Federal de Oberá.
El partido típico de final mostró más intenciones que fútbol, aunque en el balance final fue el local el que propuso mayores situaciones de goles.
La primera mitad dejó el marcado en blanco, fue en el segundo tiempo cuando aparecieron los goles. El representante obereño abrió el marcador a pocos minutos a través de Nico Portillo, mientras que Rafael Joaquín aumentó la cuenta y parecía que Olimpia San Antonio iba a liquidar el duelo. Sin embargo llegó el descuento, luego de un tiro de esquina, Rosamonte encontró el gol de cabeza, puso el marcador 2-1 y el global 3 a 3.
Con un expulsado por cada lado, no hubo tiempo para más y la definición se trasladó a los penales. El local convirtió el primero en ejecutar y Matías Kluge atajó a la visita, acercando un poco más a su equipo al objetivo. Así, mientras los dirigidos por Dario Portillo acertaron los suyos, Rosamonte marró el tercero, allanando el camino al título. Fue el arquero, Kluge, el encargado de ejecutar el penal que desató la euforia y el festejo.
«Esto es Olimpia, si no se sufre no se gana, gracias a Dios pudimos festejar. Se nos escapó, era para liquidar la serie, pero no pudo ser, por suerte en los penales Mati estuvo excelente, es suerte y se practica también. Ahora vamos por todo» afirmó Dario Portillo, el DT bicampeón.