«Como panchos por su casa», dice una frase conocida que alude a que ingresan a lo ajeno como si fuera propio. Así estuvieron los delincentes que una vez más, rompieron la puerta del vestuario chico que está en la Colectividad árabe del Parque de las Naciones y se hicieron un picnic dentro. Comieron y bebieron, se llevaron matafuegos y otros elementos, más allá del desorden que generaron.
Ya es reiterado este tipo de episodios en esta parte del Parque de las Naciones, ya que si bien existe una garita policial, las casas típicas más alejadas, desde la árabe hasta la alemana inclusive, quedan fuera de visión policial y son víctimas de estos hechos. La recorrida policial no siempre se hace y si ocurre, los maleantes son varios, cuestión que uno de ellos actúa de «campana» y los otros ingresan cuando el policia no está a la vista.
Pero el daño que generan a cada una de las colectividades afectadas es cuantioso, por todo lo que les cuesta adquirir y los árabes son el blanco preferido, cuentan ya más de 8 robos de esta naturaleza.