Convocado por familiares, amigos y diferentes organizaciones sociales y religiosas, se llevó a cabo el pedido de justicia por Marilyn Bárbaro, al cumplirse 13 años de su aberrante crimen.
Por primera vez, desde el hecho que conmovió a la comunidad obereña, no estuvo Juana Ticha Bárbaro, referente de la lucha iniciada ese mismo día por lograr que el caso no quedara impune. Ticha, afectada por un serio problema de salud, se encuentra en pleno tratamiento en Buenos Aires.
Liliana Muller, referente del UTEM-CTA, fue la encargada de abrir el acto señalando la importancia de no dejar pasar la jornada como un día más y recordar a Marilyn, por quien se debe hacer justicia. Posteriormente el Pastor Luterano Clovis Kurtz señaló «me apena y averguenza que una provincia que se jacta de tener un poder centralizado no tenga la capacidad de gestionar justicia», a la vez que repasó actuaciones judiciales de los últimos tiempos.
De parte de la familia Bárbaro estuvo presente Daniela Fontana, sobrina de Marilyn, hija de su hermana Kika. «Hablo en nombre de mi mamá y la familia, agradecemos a los que todavía nos acompañan cada 17 de abril, un día muy difícil para nosotros. Sentimos que estamos acompañados y más allá de toda estructura de poder seguimos avanzando y no vamos a bajar los brazos».
Luego de que pasaran varios oradores, se dejaron escritos nombres de víctimas de casos no resueltos en la provincia, a modo de recuerdo de cada uno de ellos para que no queden impunes. Así se recordó a Rocio Zimermann, Silvia Andrea Gonzalez, Tati Piñeiro, Mario Golemba, entre otros.