• 13/04/2025 08:24

Reflexiones entre equívocas y univocas: Hoy River (por Juan Oviedo)

Lo real es más que amplio: política, economía, pensamiento, espectáculos, futbol y aquí, en esta realidad llamada futbol es “opinar” sobre River Plate,…… tu grato nombre etc. acerca del momento que vive hoy (malo) como equipo de futbol. Primera pregunta, se habla de la “jerarquía” de los jugadores riverplatenses, ahora, la jerarquía se entiende en competencia con otra jerarquía, pero si no la hay, esa jerarquía mencionada es -mero nominalismo-, y en tal línea, los incorporados ¡campeones del mundo!, así fue publicitada esas incorporaciones, implicaba jerarquía pura, ahora, esos refuerzos fueron jugadores “suplentes” quienes conformaban el plantel campeón, con cero participaciones por haber jugado en ese mundial excepto- Acuña con cuatro partidos de titular, después, suplentes, y no se insista con la jerarquía, no es innata sino algo en permanente construcción desde el “competir”, entonces, si estoy frente a rivales menores ¡no puedo determinar mi jerarquía –presente-¡, por lo tanto el nominalismo de jerarquía acerca del plantel del equipo de River, es parte de un periodismo deportivo que repite “clichés” y punto.

Segunda pregunta, la historia de lo que “fui” contraste notablemente con la producción actual de lo que hoy “soy”, lo que fui abre un largo –potencial- que posiciona un –volver- a ser lo que fui, algo por demás recurrido por todo el mundo del periodismo deportivo de futbol, ahora, si se instala el potencial es más que suficiente para entender que la producción del jugador en cuestión es ¡mala, deficiente o deja mucho que desear!, usted exigirá apellidos: Lanzini, Fernández, Martínez, Kranevitter, todos ellos un nivel de –otra- era geológica en relación con la actual, la estrategia para traer a ese pasado fue para contentar a la hinchada, con un “caro” populismo por traer a jugadores viejos, con lesiones crónicas ¿y todo para qué?, para desviar la atención en contra de la dirigencia ante el juego deficiente del equipo.

Tercera pregunta, se habla mucho del -bajo nivel- de los jugadores, pero ¿no será al revés?, ese nivel que ¡llamo la atención! en el fondo quizás se trató de una racha positiva y generar la ilusión de estar ante algo que en el fondo -no es-, usted me volverá a pedir apellidos: David Martínez, Agustín Palavecino, José Paradela, Agustín Fontana, Alex Vigo, Luciano Lollo, Enrique Bologna, Iván Rossi, Marcelo Larrondo, Germán Lux etc., lo que nos dice una ausencia de trabajo de Scouting o reclutamiento en la institución sin lugar por comprar esas efímeras presencia del “momento” futbolístico que encandilaban y después, decepción pura tal como fueron los apellidos señalados.

Cuarta pregunta, ¿y el técnico?, Gallardo en el 2022 perdió los dos Superclásicos del año, quedó eliminado de Copa Libertadores, Argentina y de la Liga. ¿corolario?, en octubre se desvincula de River, tras pasar un año sin trabajo e ir a Arabia a dirigir, fracasar en aquellas tierras donde es despedido y según se dice, tras operaciones mediáticas posicionarse como posibilidad frente al mal momento del técnico anterior. Vuelve a ser técnico de River en el 2024 pero con él se” concentren” todas las definiciones anteriores, vayamos a ellas. Jerarquía, se la debe comparar con las –tácticas- de otros técnicos locales, y no “deslumbre” tácticamente contra ningún equipo en particular, es más, las contra tácticas de los otros
técnicos con jugadores de menores recursos se impongan. El retorno de la gloria pasada no condice con el resultado del equipo como juega, incorporo a “nueve” jugadores, pero el equipo tiene –falencias- defensivas y ofensivas, algo para destacar, si pongo un derecho a la izquierda, defina mal con su pierna menos hábil que es la izquierda por ser derecho y lo mismo con el izquierdo puesto a la derecha, y si -otra vez- me pide nombres, Mastantuono y Colidio. El nivel queda demostrado que “solo” se rescata el buen momento del ayer victorioso, pero no el fracaso del 2022, cuando es ese 2022 el que continua ¡vigente! por los resultados de eliminación de semifinal en la Copa Libertadores del 2024, el mal desempeño del equipo, pésimas contrataciones y la sospecha de negociado con alguna de ellas.

¿Síntesis?, voy a citar a un periodista deportivo –Leo Uranga- que hace unos “dos” meses atrás en una radio supo predecir acerca los refuerzos, contrataciones etc. que el “año está perdido” y como –va- el año, tenga toda la razón y a la que adhiero.

Juan Oviedo