• 19/04/2025 14:15

Reflexiones entre equívocas y univocas: ¿Institucionalidad?, es un chiste (por Juan Oviedo)

Se habla y se pondera el -no permitir- la descomposición de las instituciones porque sumiría a la República bajo cierta “anarquía” ante el mandato -no controlado- y el gobierno sería pura subjetividad, poder personal y todo lo que el –unicato- implica o la Hibris en la antigua Grecia-. Por ello la institucionalidad es el límite para aquellos que así –presiden-, pero la propia institucionalidad falla por no contar ella -a priori- con un filtro por el cual, más allá del voto de por medio, impida instalar en el sillón de Rivadavia a sujetos que no deberían gobernar. La “debilidad” institucional queda a la vista cuando esos sujetos intentan ¡vulnerar! la división de poderes, por ejemplo, cuando se busca posicionar en la Corte Suprema a jueces parciales al gobierno, como también buscar “mayoría” en el congreso para que se aprueben sus proyectos y para ello coercionar puesto que “El Gobierno Nacional amenaza con recortar partidas y giros discrecionales a las provincias para evitar que el Congreso reúna los dos tercios necesarios para ratificar el aumento jubilatorio…”(1),así, la institucionalidad se muestra como es: endeble, frágil, quebrantable y puesta en jaque por la bruta cuantificación que posiciona a cualquiera que no supo recorrer el -Cursus honorum- y “consistente en un servicio militar previo seguido de los cargos de cuestor, pretor, cónsul y censor” (2) era el nombre que recibía la carrera política o escalafón de responsabilidades
públicas en la antigua Roma.

Pero en este país, esa carrera fue cancelada y modificada, hoy se trate por -superar- la condición “ignota” del aspirante político y poder ser ¡votado!, por ello como parte estratégica a futura electoralidad quien preside, ejerció la siguiente táctica “En los años previos a su desembarco en la política, Milei venía apareciendo con mucha frecuencia en programas de televisión periodísticos y humorísticos….” (3), pero hay excepciones a tal regla de la condición ignota porque se -dice- que “Antes de meterse en política, la hermana menor del Presidente tenía su emprendimiento pastelero” (4), cuyo trabajo era ser vendedora de tortas, y contraste notablemente -hoy día-, con su nueva función ser: Secretaria General de la Presidencia pero ¿ella fue votada?, ¡no!, entonces, ¿cómo llego ahí?, es simple, se trata de la hermana de quien ¡sí! los votos posicionaron y aquí, la institucionalidad ¿está presente? ¿y de qué forma debería estar?, si claro que sí, estaba representada en el decreto “antinepotismo” que prohibía la permanencia de familiares directos de ministros en la estructura de la administración pública, pero ¿y qué paso?, bueno que “Finalmente, Javier Milei modificó hoy el decreto antinepotismo firmado por Mauricio Macri y le tomó juramento a su hermana Karina quien se convirtió en secretaria general de la Presidencia” (5).

Entonces, la institucionalidad así entendida, no ofrece garantía alguna, se siguen haciendo las cosas según los antojos y deseos de -quien preside-, lo que nos hace preguntar ¿quién protege a lo institucional?, ¡la constitución! pero ¿y quién protege a la constitución? acaso ¿se puede ir en contra de ella?, leamos lo siguiente “El mal, concretamente el “hecho maldito”, sucedió en 1994. En la plenitud de la Convención Constituyente se le reconoció al Poder Ejecutivo la atribución para emitir “decretos por razones de necesidad y urgencia” con rango legal1 (DNU). La autorización para el dictado de DNU aumentó, con desmesura, las atribuciones del presidente. Ahora, a partir de 1994, él es “jefe supremo de la Nación, jefe de gobierno y responsable político de la administración”, incluso con la posibilidad de dictar decretos por razones de necesidad y urgencia, actos que aspirarían a ser constitucionales. Esa concentración de atribuciones da lugar a nuevo animal político: el hiperpresidente, cuya degeneración originaría una nueva contraforma de gobierno de despotismo o autocracia electiva, en escándalo del principio republicano” (6).

¿Se da cuenta de porque estamos perdidos?, cualquiera sube al Estado y determina según sus particularidades el destino de 45 millones de personas, por lo cual ¡no hay solución compadre!, no la hay con este sistema, con estos votantes y estos candidatos.

Juan Oviedo

———————————————————————————————————————-(1) El Ágora, en pág. web: https://elagora.digital/argentina/javier-milei-veto-reforma-jubilatoria-congreso/ (en línea).
(2) Wikipedia en pág. web; https://es.wikipedia.org/wiki/Cursus_honorum (en línea)
(3) Juan José Domínguez, Chequeado en pág. web; https://chequeado.com/personajes/quien-es-javier-milei/ (en línea)
(4) Juan Luis González Periodista de política. Noticias en pág. web:
https://noticias.perfil.com/noticias/politica/karina-milei-y-su-emprendimiento-de-tortas-las-mejoresfotos.phtml (en línea)
(5) Política, 10 de diciembre de 2023, en Sección País,com en pág. web:
https://seccionpais.com/contenido/8063/finalmente-milei-anulo-el-decreto-antinepotismo-para-designar-a-suhermana (en línea). (6) Por Raúl Gustavo Ferreyra, Tentativa para destruir la Constitución, El caso del DNU 70/2023. Palabras de Derecho en pág. web; https://palabrasdelderecho.com.ar/articulo/4949/Tentativa-para-destruir-la-Constitucion (en Línea)