Luego de reiterados episodios de violencia cuyos protagonizados por jóvenes en los barrios de la ciudad la Jueza de Paz de Oberá, Dra. Gladis Sánchez explicó las tareas que realiza y como interviene desde el Juzgado a su cargo. “Lamentablemente debo decir que sí que son episodios que se están reiterando en los últimos tiempos, me refiero prácticamente a los dos últimos años, donde advertimos con mucha preocupación esta situación en los barrios y especialmente en estos grupos de jóvenes que a veces motivados por las adicciones, ya sea por el alcoholismo o drogadicción, están actuando de esta forma. También es cierto el amplio operativo de controles policiales en los últimos tiempos, prácticamente todo lo que va de este año, ha ayudado a disminuir al menos en las causas contravencionales que ingresan al juzgado de paz. Notamos una disminución en este tipo de problemática, sin perjuicio de eso no podemos dejar de preocuparnos y ocuparnos del tema también. Encontramos muchos obstáculos para llevar las soluciones a cabo y por eso siempre decimos, en este aspecto el punto esencial es contar con el apoyo y la contención de la familia. Los padres deben controlar mucho más las conductas de los jóvenes. Creo que desde la familia se hace necesaria la intervención y la contención”.
La Jueza de Paz indicó, “En Oberá encontramos muchísimos actores que estamos preocupados por esto, advertimos una problemática que va creciendo día a día y buscamos en forma conjunta los medios de solución. Para los casos que competen a la justicia de paz, recordemos, por un lado, que, de acuerdo al código de faltas, los menores son imputables, podría imponer yo una sanción a los mayores de 15 años. Los menores resultan inimputables y en todo caso pasan a competencia del correccional de menores. Ahora, cuando las causas ingresan bajo estas condiciones, donde sí son pasibles a alguna sanción, tengo por un lado el código con el cual debo regirme y con las modalidades de sanciones que se les pueden imponer. Y en lo particular basándome siempre dentro de las normas legales, en situaciones de adicciones, busco también de imponer alguna sanción accesoria complementaria con sesiones a cumplimentar por parte del enfermo o del adicto, dentro de lo que es alcohólicos anónimos o también con narcóticos anónimos que trabajamos en forma conjunta y realmente le prestan mucho interés y se ocupan también, colaboran en forma permanente y directa con el juzgado de paz. Hasta ahí puedo llegar con lo que estoy haciendo, creo que de pronto ese tipo de sanciones puede ser mucho más fructífera para recuperar a este chico que la sanción pecuniaria o privación de la libertad que a veces tenemos que imponer”.
Sobre la situación que atraviesan estas familias la Dra. Sánchez consideró que las tareas comunitarias como modalidad de imposición de sanción ayudan, pero son más que nada a nivel general. “Yo creo que, en el caso de estas asociaciones con narcóticos, apuntan a la enfermedad concretamente a la adicción y pueden profundizar mucho más en la problemática, por eso me parece por ahí, más convenientes para estos casos. Lamentablemente los padres no se sorprenden, pero advierto en ellos una impotencia total en cuanto al control de la conducta de los jóvenes. En normal escuchar lamentablemente aquí en varias oportunidades cuando dicen Doctora, ya no sé qué hacer con mi hijo. Perdí el control, temo por los hermanitos chiquitos. Lamentablemente es una situación muy penosa cuando tenés entrevistas con padres de estos chicos con adicciones. Mucha delincuencia arranca a partir de estos casos, por la misma necesidad de adquisición de las sustancias”, finalizó la Jueza de Paz obereña.