Con un nuevo espacio frente al Parque de las Naciones- una casilla construida al lado de la Policía turística- con entrada para camiones donde se realizarán revisiones, la oficina del SENASA se instaló definitivamente en Oberá, luego de intercambiar lugares de un lado a otro.
“Tenemos un gran espacio geográfico para controlar, esperemos al menos en este lugar quedar instalados por 20 años que es el comodato que ahora se ha hecho”, sostuvo Mario Silvero, Ingniero agrónomo a cargo de la delegación.
Desde San Pedro, hasta Candelaria y Alem es zona de influencia de esta oficina, con una coordinación regional que abarca 4 provincias y no dos, como antes. Se hace certificación de protección vegetal, con 2 ingenieros trabajando y personal acorde, pero mínimo.
Panambi, Alba Posse y El Soberbio son puertos que también dependen de esta oficina en Oberá. Según Silvero “entre 40 o 50 millones de dólares mensuales es la cantidad de productos certificados por esta dependencia, que se exportan mayormente”.
El hombre agradeció el cobijo de la Cripco (Cámara de industria, producción y comercio de Oberá) en estos tiempos en que no tenían albergue físico.