• 24/11/2024 06:19

Un asentamiento que toma forma de barrio, a 8 cuadras del centro y con más de 150 familias

Desde hace algunos años, a pocas cuadras del centro de la ciudad, continuación Villa Blanquita, final de calle Orcadas, se erige un nuevo asentamiento, el que rápidamente fue sumando más pobladores, al punto tal que hoy mas de 150 familias habitan la zona, conocida como nuevo asentamiento de Villa Blanquita.

Agustín  Olivera, es el referente de la comisión vecinal que se conformó con la intención de lograr convertirse en un barrio, solicitando apertura de calles y servicios de agua, luz, así como seguridad. «Contamos nuestra situación a los medios porque ya era insostenible, somos humildes pero queremos pagar nuestros servicios y vivir dignamente», dijo Olivera.

En poco más de una semana, se contactaron con la cooperativa Eléctrica, Defensoría del Pueblo y por supuesto la Municipalidad, quienes prometieron soluciones, que comenzaron a llegar de a poco.

«Estamos agradecidos porque hace una semana y durante dos dias enteros estuvieron las máquinas municipales abriendo caminos, ya que teníamos un trillo nomás y ni los remises querían venir hasta acá. Ni hablar que no tenemos ni luz, ni agua (la vertiente es un pozo bastante deteriorado con agua que no está apta para el consumo humano)», añadió el referente barrial.

Las familias que habitan allí hace 3 años que comenzaron a poblar la zona, muchos-casi en su generalidad-vivían en casas de alquiler pero ya no pueden sostener eso económicamente- y se ubicaron en este espacio verde.

«Estamos agradecidos a los empleados de la Municipalidad que estuvieron trabajando que hicieron un buen trabajo, abriendo los caminos, ahora queda el tema del puente porque con las ultimas lluvias, esto se inunda, van a venir a ampliar el que está. Y tambien firmamos convenio de servicios electricos con la Celo y el agua, pero hasta ahora no avanzó eso. Lo que queremos es que la policía venga mas de seguido o venga cuando llamamos porque cuando hay problemas no tenemos respuesta», indicó.

Dijo que «está bueno sentir que nos convertimos en un barrio, porque somos humildes pero tenemos dignidad y la manera en que vivimos no es justo, si tenemos otra lluvia fuerte otra vez se inundará de nuevo, agradecemos a quienes nos ayudan con el merendero y a todos los que nos escucharon y nos hacen sentir que es posible una solución a esta situación angustiante que vivimos y de la cual queremos salir», mencionó